Últimamente he escuchado de posibles clientes, responsables o propietarios de empresa, algunos comentarios diciendo «Ya sabemos lo que tenemos que hacer» o «Ya nos arreglamos sin ayuda». Es posible que en muchos casos sea cierto, pero, como todos sabemos el «oficio» del comercio es una actividad que requiere mucho esfuerzo y a veces muchas horas sin apenas contacto con otras personas, exceptuando a nuestros clientes. Por supuesto, ellos nos pueden aportar grandes ideas que muevan nuestro negocio, pero ¿qué más hay ahí fuera?
Por el contrario muchos reconocemos que las aportaciones de otros nos hacen más fuertes. Como ejemplo, he tenido recientemente la oportunidad de leer una entrevista a los componentes de Franz Ferdinand, (me encanta su música) en Mondosonoro. Franz Ferdinand es una banda musical con unos cuantos años de experiencia y varios discos. Me ha llamado la atención uno de sus comentarios, en el que reconocen que, siendo un grupo ya consolidado, han recurrido a colaboraciones con otros músicos o productores para grabar su último disco: “No queríamos que viniera un productor con un gran nombre a trabajar con nosotros. Sabemos cómo hacer que la banda suene bien, simplemente con ellos hay mucho intercambio de ideas y entre todos surgen mejores resultados»