El paso que damos al reformar nuestra tienda es muy importante, porque vamos a hacer una inversión que queremos recuperar. Debemos plantearnos sobre todo cuál es el objetivo de la reforma antes de comenzar.
Lo normal es que con la reforma busquemos vender más. Pero también podemos plantearnos algunos objetivos más específicos: tener más espacio de sala de ventas, tener un mejor acceso para los clientes, que nuestro escaparate sea más visible, adaptarnos a las nuevas tecnologías, mejorar la iluminación… y lo más importante, que nuestra tienda sea un reflejo de nuestra IMAGEN DE MARCA. Si, aunque seamos una marca muy pequeñita, debemos tener una imagen y esa imagen debe quedar grabada en la mente de nuestros clientes y que la perciban con todos sus sentidos.
Primer paso: ¿cuánto invertir?
Para esto debemos hacer una previsión de ventas para los proximos años, estudiando las tendencias de los años pasados y lo que nos puede deparar el futuro. Gabriel Olamendi comparte con nosotros este documento con las claves para hacer una buena previsión de ventas. Con la reforma pretendemos cambiar esta previsión inicial y que sea más positiva: aumentar un 10%, un 5% o no disminuir pueden ser objetivos diferentes en función de nuestra situación actual.
Sabiendo el incremento en ventas que supondrá la reforma, calcularemos los beneficios que obtendremos al año. De estos beneficios anuales determinaré qué parte irá destinada a amortizar la reforma de mi comercio. Si pedimos financiación, sumaremos los gastos que esto supone.
Segundo paso: ¿cuanto tardaré en amortizar la reforma?
Lo normal es que la reforma se amortice en el tiempo que dura, o bien su «vida útil». No todo en la reforma tiene la misma vida útil: por ejemplo, un buen suelo no dura lo mismo que la pintura de las paredes. Si debo hacer una nueva inversión pasados 5, 8 ó 15 años, este será el periodo máximo en el que debo amortizar cada una de las partes de la reforma. (Aqui puedes saber más sobre lo que es el periodo de amortización)
Tercer paso ¿cómo administro el presupuesto?
En este paso es donde debemos dedicar un tiempo a saber qué es lo más importante, qué problemas queremos solucionar, qué puede atraer a más clientes…. Déjate asesorar por profesionales como la Doctora Retail que te puedan aportar:
- Un diseño atractivo y orientado al cliente
- Un espacio bien organizado
- Que la identidad de tu marca quede bien presente en tu espacio, por dentro y por fuera
- Que consigas los objetivos que te has propuesto
- Que la reforma se adapte a tu presupuesto y se realice en el tiempo estrictamente necesario
Cuarto paso: ¡manos a la obra!
Si has dado bien los pasos anteriores, seguro que la reforma de tu tienda es todo un éxito. Comparte tu ilusión con tus clientes y haz una gran re-inauguración.
Y tu ¿has reformado recientemente tu comercio?, ¿qué tal te ha ido?. Comparte con nosotros tu experiencia.
(Imagen de Retail Design Blog)